Se espera que las facturas de gas natural sigan aumentando, ya que Andesco, la asociación que agrupa a las empresas de servicios públicos, advirtió que el aumento de las tarifas se debe a un déficit estructural en el suministro nacional de gas, lo que obligó a las empresas comercializadoras a recurrir al gas importado, una alternativa más costosa. La disminución de la producción local, la escasez de contratos de suministro a largo plazo y la falta de inversión en nuevos proyectos dejaron al país con menos disponibilidad de este recurso. La asociación rechazó las acusaciones del gobierno de especulación de precios y pidió un debate técnico para permitir la adopción de medidas fundamentales.Según Andesco, el mercado opera dentro del marco regulatorio y las empresas comercializadoras han cumplido con las normas establecidas por la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG). Dicen que el problema radica en la continua caída de la producción de gas y la falta de alternativas inmediatas para satisfacer la demanda.

Un llamado a soluciones estructurales

Para Andesco, la solución a esta crisis no es acusar a las empresas del sector, sino adoptar estrategias que fortalezcan la seguridad energética del país. Entre las acciones urgentes que propone la asociación se encuentran:

• Incentivar la exploración y producción de gas nacional: Acelerar la inversión en nuevos proyectos para aumentar la oferta local.
• Estabilidad regulatoria: generar confianza en el sector para atraer inversión en exploración y producción.
• Definir mecanismos para optimizar la importación de gas: Establecer reglas claras para que el gas importado se adquiera en condiciones más favorables para el país.

El aumento varía según el consumo de cada hogar. Jhon Jairo Contreras, vicepresidente de grandes clientes de Vanti, explicó que un usuario de estrato 3, con un consumo de 10 metros cúbicos mensuales, pasará de pagar $25.000 en 2024 a $35.000 en 2025, un aumento del 40 % en su consumo básico. En términos generales, se prevé que las familias que pagaban $38.000 mensuales en su factura ahora deban pagar alrededor de $52.000, un aumento de $14.000 por mes.

Factores que impulsarían el aumento de la tarifa

El país está experimentando una reducción gradual en su producción de gas. En 2020, Colombia generaba 1.100 millones de pies cúbicos por día (MPCD), pero para 2025 la cifra se redujo a 900 MPCD. Esta caída, según informes de Ecopetrol y la Unidad de Planificación Minero Energética (UPME), se debe al agotamiento natural de los campos y a la falta de nuevos desarrollos significativos en exploración y producción. Ante esta realidad, la oferta para satisfacer la demanda en 2025 no fue suficiente, lo que llevó a las comercializadoras a buscar gas en el mercado secundario e importar gas natural licuado (GNL). 

Sin embargo, el GNL está vinculado a precios internacionales, que generalmente son más altos que los del gas local, lo que ha aumentado las tarifas para los consumidores.Un informe del 23 de septiembre de 2024 identificó un déficit promedio de 120,7 GBUTD (Giga British Thermal Units por día), equivalente a entre el 9 % y el 12 % de toda la demanda del país. Esta falta de gas local obligó a las empresas a contratar en el exterior, aumentando los costos de suministro. Por otro lado, el reciente anuncio de Ecopetrol sobre la disponibilidad de gas generó expectativas en la opinión pública, pero Andesco aclaró que estos volúmenes no estarán disponibles de inmediato. 

Según el comunicado de la petrolera, las empresas interesadas en adquirir este gas deben manifestar su interés antes del 14 de marzo, y cualquier entrega solo podría concretarse a partir de junio de 2025. Mientras tanto, el gas que actualmente reciben los consumidores corresponde a contratos firmados previamente. Esto significa que la escasez seguirá presionando los precios en los próximos meses. Andesco insistió en que es necesario precisar las cantidades exactas de gas que Ecopetrol pondrá a disposición y que la CREG debe establecer reglas claras para que su venta beneficie a los usuarios.La asociación reiteró que las alertas sobre la reducción de gas no son nuevas. 

Desde 2023, la asociación y otros actores del sector señalaron la necesidad de tomar medidas para evitar impactos en los precios. En septiembre de 2024, la advertencia se reiteró públicamente, cuando se anticipó que el déficit de oferta se evidenciaría en los procesos de compra de diciembre. El propio Ministerio de Minas y Energía, a través de la UPME, reconoció esta situación en sus balances de oferta y demanda, sugiriendo medidas de contingencia. Sin embargo, la reciente Resolución CREG 102 015 de 2025, que busca flexibilizar las reglas del mercado para mejorar la oferta, solo entrará en vigencia a partir del 1 de junio, por lo que no alivia la crisis inmediata.

Fuente: elespectador.com